Que me gusta una escopeta y un perro con buenos vientos, y una vezana de trigo y una sombra para yo verlo. Y que se arranque una liebre como el viento ligera, y que la corra mi perro, y que la alcance a mi vera. Y me gusta disfrutar de mi escopeta y mi perro, y de una copa de vino, y de los hombres cabales que al campo vienen conmigo.

Mi perro bebe en mi mano si vamos de cacería, y espera que se la de de la cantimplora mía. Y no teme a los barrancos ni a los caminos cortaos, porque mi perro confía que su amo está a su lado. Cuando mi perro me ve con la escopeta encará, se queda fijo mirando para ver dónde voy a tirar. Y si ve que no disparo, me avisa con un gemido para que la próxima vez, no me coja distraío.

El mejor trago de vino yo me lo tomo sentado, esperando que mi perro me traiga lo que he cazado. Un pajarillo perdiz, que lo alicorté de un tiro en lo alto de un collado y se escondió entre los trigos.

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8 de noviembre de 2010

QUE HARIA MI PERRA EN UN COTO CON CONEJOS



Que aria mi perra en un coto con conejos, mira que tiene fe el animal, ella no para nunca de buscar ni a la hora de subirla al remolque, mientras subimos a otros perros al remolque, que algunos hay que hablarle de usted y por favor para que se suban, pues la mía sigue y sigue buscando, hasta que le digo chica se acabo al remolque, dicho y hecho, para a dentro sin reschitar, la una y la otra.

Ayer estuve otro rato en el coto, desde la 8,30 , hasta las 12 h por toda la orilla de una rambla muy bonita pero nada mas, y llegando a unas morras que me gustaron tanto a mi como a la perra, miramos una y nada, llega la perra a otra mi compañero me llama ven y veras, que bonito es esta rehoya, y en ese momento llega otro socio del coto, que estaba a los zorzales y empezamos a hablar, yo mirando a la perra me doy cuenta que estaba en la atocha marcando conejo, digo ahí tiene la perra el conejo dicho y hecho zapatazo del conejo y al agujero.

Me cago en too lo que se menea, para uno que echa el animal y yo dándole a la sin hueso. Lo que si tuve a dos metros un choto colorao que cuando lo vi creí que era un ternerillo, me puse en contacto con la pastora que conozco creyendo que era de ella, y me dijo que lo llevaba buscando el dueño una semana, as que le di las coordenadas para que recogiesen al animal.

Estuvo el animal mas de una hora detrás de nosotros, cosa curiosa.

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