Que me gusta una escopeta y un perro con buenos vientos, y una vezana de trigo y una sombra para yo verlo. Y que se arranque una liebre como el viento ligera, y que la corra mi perro, y que la alcance a mi vera. Y me gusta disfrutar de mi escopeta y mi perro, y de una copa de vino, y de los hombres cabales que al campo vienen conmigo.

Mi perro bebe en mi mano si vamos de cacería, y espera que se la de de la cantimplora mía. Y no teme a los barrancos ni a los caminos cortaos, porque mi perro confía que su amo está a su lado. Cuando mi perro me ve con la escopeta encará, se queda fijo mirando para ver dónde voy a tirar. Y si ve que no disparo, me avisa con un gemido para que la próxima vez, no me coja distraío.

El mejor trago de vino yo me lo tomo sentado, esperando que mi perro me traiga lo que he cazado. Un pajarillo perdiz, que lo alicorté de un tiro en lo alto de un collado y se escondió entre los trigos.

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15 de noviembre de 2011

LOS MEJORES MOMENTOS DE LA CACERIA

Momentos de tertulia, mientras se hacia la enfritada, de cuatro conejos y tomates raf
El amigo, Francisco y Polo, preparando el pan para mojar, y José que no veía la hora de empezar
Bueno, esta es otra de mis especialidades, enfritada de conejo, con tomate, pimientos, un poco de cebolla, ajos y pimientos asados en la lumbre, ya os explicare la receta como se hace, para que la carne de caza, quede muy tierna, hoy no, pues voy un poco apurado de tiempo.

Aquí como no el maestro, Juan cantando otro de sus cantes, pues no se le acaba el repertorio, del palo que sea.

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